Por: Bryan Steven Cardona Ciceri

La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ha reconocido al exsoldado Alfonso Mateus Ávila como víctima, tras ser herido por una mina en 2008 durante un enfrentamiento con las Farc-EP.

En un reciente fallo, la Sección de Apelación del Tribunal para la Paz revocó una decisión anterior y acreditó como víctima a Alfonso Mateus Ávila, exintegrante del Ejército Nacional. Ávila perdió un pie y sufrió quemaduras significativas debido a la detonación de una mina antipersonal mientras participaba en una operación militar en el municipio de Colombia, Huila, contra el Frente 31 de las Farc-EP.

La Sala de Reconocimiento de Verdad había negado inicialmente la acreditación de Ávila, argumentando que los hechos se inscribían dentro de un acto de combate legítimo. Sin embargo, la apelación presentada por la defensa del exsoldado logró un cambio en la percepción del caso, alineándolo con el macro-caso 10 de la JEP, que se enfoca en crímenes no amnistiables realizados por las extintas Farc-EP.

El uso de minas antipersonal, como el que afectó a Ávila, es considerado una violación a las normas de guerra y está siendo investigado por la JEP. Este tipo de armamento, por su naturaleza indiscriminada, puede constituir una infracción al Derecho Internacional Humanitario, aunque la JEP aclara que no es necesario que se configure una infracción grave para reconocer a una víctima.

Con esta resolución, se garantiza que Alfonso Mateus Ávila podrá participar como interviniente especial en el proceso judicial, ejerciendo su derecho a la verdad, justicia y reparación. Este caso subraya la importancia de reconocer a todos los afectados por el conflicto armado, independientemente de su rol en las hostilidades, como parte esencial en la construcción de una paz duradera y justa en Colombia.