Por: Juan Manuel Esquivel Gutierrez

Vibrante victoria española por 5-4 ante Francia en una semifinal histórica de la UEFA Nations League. Lamine Yamal brilla con un doblete y España se cita con la final.

En una semifinal para el recuerdo, España derrotó a Francia por un emocionante 5-4 en la UEFA Nations League. El encuentro, disputado en un estadio abarrotado, ofreció un espectáculo de fútbol de alto nivel, con goles, emoción y una exhibición de talento joven por parte de ambos equipos. La victoria española clasifica a la "Roja" para la gran final del torneo, consolidando su posición como una potencia emergente en el fútbol europeo.

El partido estuvo marcado por una fulgurante ofensiva española, liderada por la irrupción estelar de Lamine Yamal. Sus dos tantos, uno de penal, se sumaron a los goles de Nico Williams, Mikel Merino y Pedri, construyendo una cómoda ventaja inicial. La actuación del jovencísimo Yamal ha generado un gran optimismo en el seno de la selección española y ha consolidado su proyección como una de las grandes estrellas del futuro del fútbol mundial. Su talento innato y su madurez en el campo impresionaron a propios y extraños.


A pesar del dominio español, la reacción francesa fue imponente. Kylian Mbappé y Rayan Cherki descontaron para los galos, y un autogol de Dani Vivian y un tanto de Randal Kolo Mouani en los últimos minutos pusieron en vilo a la afición española. La remontada casi se consuma, mostrando la garra y el carácter competitivo del combinado francés, aun con la derrota. El partido demostró, una vez más, la elevada competitividad del fútbol europeo de elite.

El encuentro se convirtió en una muestra de la renovación del fútbol español, con jóvenes talentos mostrando su potencial en un escenario de máxima exigencia. La victoria, sin embargo, no estuvo exenta de sufrimiento. La reacción francesa, aunque insuficiente, demostró la gran calidad de su plantel. Este triunfo catapulta a España a la final, donde buscará continuar con su buen momento y alzar el título, confirmando el progresivo ascenso de la selección española y el potencial de su nueva generación dorada. La victoria genera un optimismo cauteloso, pero palpable, en el panorama del fútbol español.