Fecha de publicación: 2024-09-02 10:16:54
Hace varios días, la Institución Educativa Agropecuaria Feliz María Ortiz de Itaibe, Páez, Cauca, desarrolló el Encuentro Interétnico 2024. Gracias al profesor Juan Carlos Barbosa, fuimos invitados Humberto Andrade, Manuel Jota Medina y Moisés Ángel Vargas a la primera gran simultánea de ajedrez.
2024-09-02 10:16:54
Queremos agradecer al organizador, profesor Barbosa, al rector Arcadio Castro, a Inirida Bermúdez, al personal administrativo y docente de la institución, y a los estudiantes por la acogida e interés prestado a este encuentro. Los participantes fueron magníficos contendores que nos llenaron de satisfacción por el nivel de juego del ajedrez.
El ajedrez es considerado un deporte-ciencia porque, además de requerir cierto nivel de destreza mental, se fundamenta en una estrategia y una táctica. Es divertido, saludable y puede ser practicado por todas las edades.
El ajedrez debe ser más integrado al sistema educativo con programas que enseñen el juego desde una edad temprana. Es una herramienta para desarrollar habilidades cognitivas, estratégicas y de toma de decisiones. Está científicamente demostrado que el ajedrez tiene una amplia capacidad formativa que ayuda a la mejor comprensión y asimilación de cualquier materia. Contribuye a elevar la posibilidad de aprendizaje de las asignaturas y a que los niños y niñas sean mucho más eficaces en el ejercicio de las ciencias exactas y sociales.
Con un abierto diálogo de los invitados, Andrade, Medina, Vargas, Ramirez y moderado por el profesor Barbosa. Se comentó la historia fascinante del origen del ajedrez en la India, alrededor del siglo VI, y que se dividía en cuatro partes que representaban las ramas del ejército indio: infantería, caballería, elefantes y carros, considerando el precursor del ajedrez moderno que evolucionaron en peones, caballos, alfiles y torres. Desde la India pasó a Persia, con la conquista árabe a Persia se difundió por el mundo musulmán y llegó a Europa por España e Italia. En el siglo XV la reina se convirtió en la más poderosa del tablero, reflejando la influencia creciente de las monarcas femeninas. Para el siglo XIX, con reglas estandarizadas, controles de tiempo, publicaciones, la codificación de teorías de aperturas, finales y las competiciones formales, inicia su periodo moderno.
Lo que más gustó es la leyenda que ha perdurado a lo largo de los siglos. Cuenta la anécdota que el rey indio Sheram quedó tan impresionado por el juego de ajedrez, inventado por el sabio Sissa, que le ofreció recompensar con lo que pidiera. Sissa, muy sabio, solo pidió un grano de trigo por la primera casilla, dos por la segunda, cuatro por la tercera y así sucesivamente, duplicando la cantidad de granos en cada casilla hasta llegar a la última, la 64. El rey aceptó de inmediato y cuando los matemáticos del reino calcularon el total de granos, no había esa cantidad de trigo en el reino, ni sumando la de otros reinos vecinos. Y el rey Sheram terminó apenado. La historia sirve de lección para la progresión geométrica y las implicaciones de nuestras promesas antes de hacerlas. Leyenda sobre la inteligencia y la sabiduría, así como sobre la humildad y la prudencia.
Una vez más, agradecer a todos los estamentos de la institución educativa agropecuaria de Itaibe por el foro, el diálogo, la cantidad y calidad de los participantes y sus atenciones.
Al margen. El peón es la pieza más humilde del ajedrez, pero también la más valiente. Con cada paso, avanza sin mirar atrás, sabiendo que cada movimiento lo acerca al peligro o a la gloria, ser sacrificado, o la pieza única en poder ser coronada . El peón demuestra que incluso lo más pequeño tiene el poder de cambiar el destino de una partida. Dicen que es donde un peón se puede comer a la reina.
