Fecha de publicación: 2024-03-18 14:18:50
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2024-03-18 14:18:50
Ventas por más dos mil millones de pesos en arroz se obtuvieron el pasado 30 de junio cuando millones de trabajadores colombianos, especialmente de hogares pobres, salieron con su salario y algunos con su prima a abastecerse de mercado para terminar de sobrellevar la cuarentena, convirtiendo así a este producto, junto a los huevos y el aceite, en los productos estrella de la canasta familiar, teniendo en cuenta que en los meses de abril y mayo se habían logrados ventas por los 70 millones de pesos.
El arroz es incluido en el mercado de siete de cada 10 hogares, subiendo a 8 de 10 dentro de los estratos más bajos. De 100 pesos en el gasto total de las unidades familiares, 2 pesos se destinan a comprar y en los estratos de menores ingresos sube esta inversión a 5 de cada 100 pesos. En promedio gastan mensualmente en arroz 30.783 pesos por hogar, cifra que sube a 37.425 pesos en los estratos pobres, lo que corresponde al 12 por ciento de lo que destinan a alimentos.
Estos son algunos de los resultados del seguimiento que presentó el Dane, para establecer no solo el comportamiento de los precios de los alimentos, sino el volumen de ventas diarias de los productos que más están demandando los ciudadanos.
El ser recursivos es la nueva tendencia aplicada para la alimentación a la hora de armar el menú diario, reflejo del choque en los ingresos de los hogares por efectos de la pandemia.
El huevo, por ejemplo, se volvió la principal fuente de proteína, en reemplazo de la carne de res, de cerdo y de pollo, lo que, según el director del Dane, Juan Daniel Oviedo, es una señal clara de la economía de la recursividad. De las ventas promedio diarias de huevo en abril y mayo, que sumaban 80 millones de pesos, se pasó a 130 millones de pesos por día en junio.
Siete de cada diez hogares tienen este producto en su canasta básica, pero, curiosamente, las mayores compras no las hacen los pobres, sino los ubicados en los niveles socioeconómicos vulnerables y clase media, según la clasificación por estratos que tiene el Dane. El gasto mensual en este artículo esencial en la canasta de alimentos es de 18.000 pesos en promedio. La alta demanda de huevo ha llevado a que su precio pase de 350 pesos en abril y mayo, a 250 pesos en junio.
Por su parte, el aceite se ha convertido en el tercer producto de mayor demanda en la temporada de cuarentena. Seis de cada diez hogares en el total nacional lo utilizan, mientras que entre los pobres la demanda se incrementa a 7 de cada 10 hogares y en la clase alta baja el uso a 5 de cada 10 hogares. En general, se destinan 15.000 pesos mensuales a este gasto, el cual sube a 16.145 pesos en las clases sociales pobres.
Tras una cuarentena drástica con el aislamiento social, los primeros meses de la pandemia llevó a las personas a comprar grandes volúmenes de productos. Ahora se ha vuelto la moderación. Esto no es solo por el retorno gradual a las actividades económicas, sino también por la reducción de los ingresos de las familias.
Si antes compraban cajas de aceite por seis unidades, ahora solo llevan una unidad de un litro. En el caso del arroz, lo más vendido entre el 1 y el 7 de julio es la bolsa de 500 gramos, mientras que en abril y mayo predominaban las ventas de paquetes de más de un kilo.
Gasto de los hogares en junio
Según el estudio Gastometría de Raddar, los hogares colombianos gastaron en junio $58,4 billones, lo que representó un aumento de 3,2% frente al mismo periodo de 2019, sin embargo, descontando inflación, el aumento fue de 0,97%.
El informe señala que 11 de las 13 principales ciudades del país aumentaron su consumo en junio frente al periodo anterior, siendo la ciudad de Neiva donde más se vio incrementado el consumo con el 5,2%, seguida de Cúcuta (4,4%) y Barranquilla (3,2%). Las únicas ciudades que registraron descensos fueron Bogotá (0,1%) y Pasto (1,4%).
Según se explica, el aumento se debió a que muchos hogares decidieron hacer gastos que no realizaron en abril y mayo por la incertidumbre de la pandemia. Además, durante el mes de junio se llevó a cabo el primero de los días sin IVA, que permitió un incremento en el gasto de ciertas categorías.
Las tiendas de barrio fueron los lugares en donde más creció el gasto (en términos reales) con 6,2%, seguido de las grandes cadenas con 3,4%. Mientras que los centros comerciales, como es de esperarse, el gasto fue solo de 25,1%.
